Aquí esta el yugo. En la localidad antes era una costumbre tener yuntas para arar la tierra. Para Gonzalo Cerón esta herramienta le recuerda cómo era la vida antes. Según él, todo lo que ya estaba limpio desmontado, se araba y se tapaba con trigo. Él es quien dono el yugo; tenia las yuntas «nosotros criábamos, nosotros les amansábamos, les poníamos el nombre y los toros entendían, el Lucero, el Brazil, esos nombres»(2024). Había carpinteros que se dedicaban hacer estos yugos. A veces se rompían entonces tenían que comprar otro.

Gonzalo Cerón dijo » fue la primer televisión que compramos porque no teníamos los sueltos para comprar una grande»(2024). Carmen Aguirre dice que la televisión es más después del 1975 porque no había luz «como en el 80, por ahí 82 vino la luz» (2024).

Isidro Narváez dijo que la costumbre de la montura viene de Colombia. » La gente que venía de allá a vivir acá tenían ya esa costumbre de andar en caballos poner esas monturas» La gente de la parroquia empezó a usar monturas para salir todos los domingos hacer las compras en Pimampiro, » antes solo un piloto así nomas de carretera «. » Todo mundo salía con sus caballos, con sus burros montados sino con cargas también. La carga era en una especie de albarda que se le ponía al caballo»(2024). En las alforjas se ponía la compra que se hacía en Pimampiro. En cambio desde la parroquia se llevaba trigo maíz, cebada, fréjol. «Antes, como ahora existen las motos, había los caballos todo mundo venía en caballos al centro de la parroquia. La gente joven se esmeraba por tener un buen caballo, una buena montura, un buen freno. Ahora las que tienen la moto que brama más duro»(2024).

En1979, en los programas grandes que había en la parroquia como dramas, festivales de la canción se utilizaba esta lámpara Petromáx a falta de luz eléctrica. Como era a base gasolina a veces la lámpara se caía en plena fiesta, siempre tenían que tener repuesto. «No cualquiera tenía eso, era también un lujo; de la gente que tenía dinero. Después se consiguió la planta eléctrica para los programas»( participante en el taller de curaduría, Carmen Aguirre 2024)

Los días domingo abajo de la iglesia había una cancha de pelota de tabla. El suegro de Carmen Aguirre, el papá de Marco Arciniegas tenía las canchas y 8 o 10 tablas. «Nos prestaba a los interesados, a los que nos gustaba jugar. Entonces, eso era bien bonito porque se reunía bastante la gente al menos los días domingos para conservar, bueno tantas cosas, amistades todo eso. Así nos divertíamos antes» (participante al taller Isidro Narváez 2024)

Delia Villota de 52 años dijo: «esa romana es del papá de mi suegro, ósea de hace muchísimos años»(2024). Marco Arciniegas comentó: «¿de 1950 será?». A lo que Isidro responde: » ¡más! tiene unos 100 años esa romana». Delia Villota continúa: «Si, más o menos porque dice que el papá de mi suegro tenía esa romana y luego le heredaron a mi suegro. Luego como yo fui a vivir a la casa de ellos, entonces yo la guarde. Y de allí pis como se ofreció acá, pues digo la llevo, claro porque cuando yo me muera nadie la ha de guardar»(Delia Villota en el taller 2024).

La «Relación de la doctrina de Pimampiro» escrita en 1582 por el padre Antonio Borja. https://pares.mcu.es/ParesBusquedas20/catalogo/description/132607?nm

Cuando socializamos este documento para hablar sobre la zona de los montañeses, quienes intercambiaban con los indios de la Amazonía productos y personas, surgieron varias historias orales: Carmen Aguirre dice » eso hace unos 55, 56 años tal vez, conversaban no, y dentro de ellos era un cuñado mío que ya falleció. Que habían echo como decir un grupo de gente de acá y se fueron camino al oriente, pero se perdieron ellos. Se perdieron pero decían que habían ido a dar a los Cofanes, que de aquí sale a San Cecilia, que sale por aquí pero se perdieron en el trayecto que comieron hasta pepas. Bueno fue una gran historia. Y ahorita todavía hay dos personas que sobreviven a esa trayectoria que habían hecho. Los demás ya son fallecidos. Salieron en el diario cuando fueron a encontrarles en el aeropuerto en Quito de acá les habían rescatado. Inclusive comentaban pues no, como ya se les termino todo lo que llevaban ellos de alimentos, que le estaban viendo a un señor como candidato para comerle. Estaban pensado en comerle porque solo comían pepas»(2024).

Isidro Narváez dice: » Sobre esto, tal vez como para recordar esta historia no, está muy bonita. En la comuna San Miguel arriba en la montaña, pero arriba. Si se encuentra algo como especie de caminos que van para el oriente. Bueno yo he recorrido muchísima. Pero lo que acaba de decir la compañera Carmen en el año 68 cuando apareció acá en el Ecuador. De parte del gobierno provincial en ese entonces hicieron una comisión y les pago el gobierno provincial para que hagan la ruta por aquí para sacar el acueducto de petróleo por aquí. Porque es mucho cerquísima. Y ahí fueron alrededor de unas 70 personas en diferentes etapas no. Bueno haciendo tambos no lo que se dice, unos iban 15 días otros 15 días. Decían que el terreno era bien bonito. Y por el año 84 el compañero Gonzalo en grupo de 16 personas fueron hacer un recorrido por allá, justo hasta donde habían llegado los compañeros que fueron en el 68. Hasta ahí en el rio Aguas Claras no, en la conferencia con el río Dorado. ¿Por qué se quedaron los del 68? porque se fueron en un tiempo que mucho llovía en el mes de Marzo entonces lo ríos se les creció muy abundantemente. En ese entonces, por ejemplo, Gil Tapia el se había ido 100 metros en el río y se alcanza abrazar de un palo y se queda. Siguiendo esa historia, nosotros tenemos mucha conexión con el oriente. En el 87 organizamos un grupo, una asociación de trabajadores con la finalidad de entrar al oriente a sembrar y hicimos un camino por donde fueron los compañeros y trazamos un camino de 35 kilómetros»(2024).

En el año 2012 Isidro Narváez con dos personas fue a la parroquia de Puerto Libre. Ahí les recibieron los profesores y les contaron una historia: «Por el año 50, 55 había aparecido una fiebre bastante extensa allá en el Oriente que le llamaban la fiebre amarilla. Y la gente se dispersó por no morirse. Los cofanes se dispersaron para el sur y para el norte. Entonces viniendo para acá para el norte, está la historia de nuestro coterráneo Don Rosalino Mora, finado. Él había sido heredero de allá del Oriente de los cofanes y sale él acá a la parroquia que se llama La Sofía y luego llega a Santa Bárbara y se queda ahí donde el señor de apellido Mora. Yo le investigué acá a don Rosalino Mora y le digo, usted ¿en qué tiempo salió de allá de Santa Bárbara cómo llego usted ahí? No dice verá don Isidro yo me acuerdo que tenía talvez unos 7, 8 años pero yo no tenía zapatos, yo no me ponía pantalón». Gonzalo Cerón interesado en la historia pregunta: entonces ¿ qué se ponía? Isidro continua: » dice yo me acuerdo que me sabía poner una bayeta dice así. Justo era de los cofanes él. Y le digo y zapatos que se ponía. No dice, mi papasito me daba haciendo unas oshotas dice de caucho»(2024).

«La otra historia de que acá en San Miguel es que les cogieron a tres jíbaros justo en ese tiempo donde salieron por la enfermedad. Según el cálculo una tenía aquí alrededor de 16 años y tenía una cría» (Isidro Narváez en el taller 2024).

La señora con gafas es la esposa del expresidente León Febres Cordero. El suegro de Carmen quien tiene los papeles está recibiéndola en la parroquia de Chuga. Esta fotografía estaba grapada ocasionando orificios en esta imagen.

En el museo están estos documentos escritos expuestos al aire libre. Condiciones que pueden deteriorar el papel y dañar el contenido que contienen estas hojas. Aquí hay las anotaciones que hacía el teniente político sobre problemas o actividades que sucedían en la parroquia. La conservación de estos documentos es importante para conocer la vida cotidiana en la localidad durante la el último tercio del siglo XX.

También reflexionamos sobre las forma de exhibir los objetos arqueológicos sin añadir decoraciones. En el taller surgió la necesidad de contar con vitrinas para proteger estas piezas. En nuestro caso, como investigadores historiadores consideramos importante el examen de estás piezas arqueológicas para conocer la fecha de producción de estos objetos y los usos que tenían. Es importante un diálogo con otras disciplinas de las Ciencias Sociales y la comunidades para fortalecer los procesos de construcción de la historia local de la parroquia San Francisco de Sigsipamba.

Antes del taller Carmen Aguirre ya puso papeles con descripciones en los objetos del museo. Al finalizar la tarde tarde, todos y todas se apropiaron del objetivo de conservar lo que tienen en el Museo Comunitario. Delia Villota (Susanita) dijo que que es importante conservar esos objetos «para que algún día nuestro hijos, nuestros bisnietos se enteren de lo que habido de lo que hemos podido conservar»(2024). Blanquita Rosero dijo «primeramente nosotros debemos saber de donde venimos y sentirnos orgullos de nuestros antepasados, de nuestras raíces. Y los objetos la historia es la forma más que nos acerca a empoderarnos y a saber, a sentirnos orgullosos»(2024). Isidro dice: » para mi esto que nosotros hacemos acá, yo le conjeturo como una diversión, una socialización con la gente. Cuando nosotros venimos aquí nos reunimos con los compañeros conversamos o hacemos las reuniones. Eso tal vez nos hace desestresar de la cotidianidad. Para mi es una terapia es una salud, un convivir muy sano»(2024).

Esta cinta fue conservada por Isidro Narváez. Él tenía dos cintas en su casa. En 1983 fue la última vez que se proyectó este film. En el 2022, llevamos la cinta a la Cinemateca Nacional para conocer el estado de las dos cintas. Clic en la imagen para más información.

Taller realizado por: Patricio Núñez, Santiago Tello, Alexander Vaca en el marco del curso de Historia Pública-FLACSO.